[COLUMNA] Argentina-Chile: Hay Que Tomar Responsabilidad


Tengo rabia. Argentina ganó únicamente porque Chile lo permitió. Sólo tomó un roce del Chapa Fuenzalida, que no supo parar a Di María al correr detrás suyo dentro del área, en 15 minutos de partido. Penal de Messi, 1-0 y listo. Fue todo. Para el resto del encuentro, la Pulga apenas nos recordó que estaba en la alineación. Sólo podrían salvarse Mascherano y  Di María. Casi como siempre.

Nuestra selección jugó mejor, sí. Sobretodo en el primer tiempo. Tuvo más fútbol, posesión, intención e incluso un gol anulado por offside. Luego vinieron el penal, el “casi” de Otamendi y un par de achiques en los que Claudio Bravo mostró toda la clase que en Inglaterra no le quieren reconocer, pero en el segundo tiempo Argentina simplemente no le dio trabajo. Por su parte, Chile reaccionó demasiado tarde. Sólo al final del encuentro nuestra selección metió completamente a Argentina en su arco y le faltó partido.

Ya en el primer tiempo era evidente que los cambios lógicos eran Valdivia por Hernández (cuyo aporte al final demostró ser más defensivo, pero no creativo) y Castillo por Fuenzalida. Pero Pizzi no se atrevió a comenzar la segunda parte con ellos, sino que esperó 10 minutos para hacer entrar a Castillo y 25 para hacer ingresar al “Mago”, pero no por Hernández sino por el Gato Silva.

Con ellos, Chile se acercó un poco más, pero nunca pudo tener la claridad requerida en la finalización. Aún así, jugó mejor que Argentina, pero de qué sirve ser más si la superioridad no se traduce en goles. Lo más claro que tuvo La Roja fue el gol anulado y el palo de Alexis en ese tiro libre del segundo tiempo.

Me quedo con la sensación de que hay algo que siempre se repite en estos escenarios ante este rival. La adversidad que no se puede revertir a pesar de jugar mejor. Recuerden que también Argentina nos ganó el año pasado en el Estadio Nacional donde Chile, con un montón de ausencias, aunque jugó sólidamente tampoco pudo contra ellos.

Chile no estaba para perder, es verdad, pero no podemos culpar a Sandro Ricci por la derrota. El penal es discutible, pequeño o no, pero lo cobraron y a la FIFA. ¡Crezcamos en eso de una vez!

Creo que es Carlos Timoteo Griguol el que dice que para evitar quejarse del árbitro, cobre lo que cobre, hay que demostrar ser mejores y marcar un gol más que el rival. 

Yo soy práctica y ya aprendí hace rato: En el fútbol no existen los merecimientos. La única justicia son los goles que se convierten y en eso no puedo culpar a Argentina. Si te cobran un penal a favor, lo aprovechas, lo marcas y ya. 

Chile perdió este partido ante una Argentina paupérrima cuyo mayor valor es la tasación individual de sus jugadores. Pero aún así, en este momento, ellos están terceros en la tabla y Chile está afuera del mundial. 

Es imperativo ganarle a Venezuela. Aún queda camino y esperanza, con calculadora y todo, pero hay que tomar responsabilidad. Ser “bicampeones” aquí no juega. Las dos Copas América no marcan los goles aquí. Punto. Hagámonos cargo.